Trastornos del Ánimo
Algunas personas se sienten tristes o irritables de vez en cuando y pueden decir que están de mal humor. Los trastornos del estado de ánimo son diferentes porque estos afectan a diario el estado emocional de la persona. Aproximadamente, 1 de cada 10 personas mayores de 18 años, tiene un trastorno del estado de ánimo.
Se tratan de una amplia gama de afecciones mentales en los que se producen anomalías de índole emocional que interfieren en el sano y correcto funcionamiento de la persona, siendo los más comunes la depresión y la bipolaridad, los cuales pueden desencadenar el riesgo de atentar contra la propia vida.
Los niños, los adolescentes y los adultos pueden tener trastornos del estado de ánimo. Sin embargo, los niños y los adolescentes no siempre tienen los mismos síntomas que los adultos. Es más difícil diagnosticar trastornos del estado de ánimo en niños. Esto se debe a que no siempre pueden expresar cómo se sienten.
La terapia, los medicamentos, el apoyo y el cuidado de sí mismo pueden ayudar a tratar los trastornos del estado de ánimo.
El diagnóstico se realiza en los casos en que la tristeza o la euforia son demasiado intensas, aparecen acompañados de otros síntomas característicos y de la limitación de la capacidad de llevar una vida normal a nivel físico, social y laboral.
Algunos Trastornos del Ánimo
Depresión grave.
Tener menos interés en las actividades habituales, sentirse triste o desesperanzado y tener otros síntomas durante al menos 2 semanas puede indicar depresión.
Distimia.
Tener un estado anímico depresivo e irritable leve pero constante (crónico) que dura por lo menos 2 años.
Trastorno bipolar.
Tener períodos de depresión que se alternan con períodos de manía o un estado de ánimo eufórico.
Trastorno del estado de ánimo relacionado con otra afección médica.
Muchas afecciones (como cáncer, lesiones, infecciones y enfermedades crónicas) pueden desencadenar síntomas de depresión.
Trastorno del estado de ánimo inducido por sustancias.
Los síntomas de depresión se deben a los efectos de medicamentos, abuso de drogas, alcoholismo, exposición a toxinas u otras formas de tratamiento.
“La depresión es un problema de salud real y tratable. ¿Qué necesitas para hablar con un doctor o un terapeuta sobre cómo te sientes?”